A través de la mirada de un niño de tres años, desplazado de su condición de benjamín por el nacimiento de su hermana, y a lo largo de doce horas, el novelista nos describe la vida y afanes de una familia de la alta burguesía española de los años sesenta: el autoritarismo de un padre vencedor de la guerra, la inseguridad y fustración de una madre cargada de hijos, el enfrentamiento generacional, la crisis de la familia, las inquietudes y terrores del alma infantil, y todo un cúmulo de sugerencias y circunstancias vistas siempre con humor, ternura y a veces también con desgarro.